En un encuentro realizado en el Centro Cultural de Carabineros ubicado en Providencia, y frente a 188 Comisarios de Carabineros que llegaron desde todas las zonas del país, el Subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, fijó hoy una hoja de ruta para el trabajo preventivo de la policía uniformada en los territorios.
En su presentación, Vergara expuso cinco grandes ejes relacionados a la seguridad preventiva para que Carabineros cuente con una estrategia territorial emanada del poder civil.
Como primer eje, Vergara sostuvo que se deben abrir las comisarías para articular con más fuerza el diálogo y trabajo conjunto con la ciudadanía. En esa línea, precisó que ello implica sustentar el trabajo en las MIC (Modelo de Integración Comunitaria), los STOP y los Consejos Comunales, agregando que si bien “sabemos que con ello quedamos cortos y es necesario que se generen nuevos espacios, urge identificar a los actores locales, como los comités de seguridad y organizaciones sociales, para convocarlos a trabajar en conjunto”
En segundo lugar, la autoridad resaltó la importancia de focalizar el trabajo preventivo sobre los delitos que generan mayor daño, particularmente los que atentan contra la integridad directa de las personas, como los delitos con mayor violencia. En esa línea, indicó que “lamentablemente” mucho del trabajo se mide bajo la categoría de Delitos de Mayor Connotación social, donde en la misma categoría conviven situaciones tan disímiles como los homicidios y el robo.
El Subsecretario Vergara expuso como tercer eje el aumentar los patrullajes mixtos bajo lo que se conoce como co-producción de la seguridad, resaltando que ello permite unir los recursos preventivos de los municipios y la labor policial. “Esto se trata también de aumentar la eficiencia en el uso de los limitados recursos de seguridad con los que cuentan muchas comunas. Todo esto bajo el paraguas del nuevo OS 14, que permite una articulación más efectiva con los municipios”.
En tanto, agregó, el cuarto eje está relacionado con intensificar las labores sobre el narcotráfico y el crimen organizado, especialmente sobre quienes intentan disputar no sólo el espacio del Estado en los barrios, sino que además sobre quienes intentan desplazar a la ciudadanía, “privatizando los espacios públicos para cometer delitos y sostener mercados ilícitos”.
Nuestra responsabilidad como autoridad civil de la seguridad preventiva es otorgar a las policías directrices de acción preventiva que permitan establecer los parámetros para las estrategias territoriales
El último eje, planteado por el Subsecretario de Prevención del Delito frente a los Comisarios de Carabineros busca coordinar internamente con otros departamentos de Carabineros -como el OS 10- operativos de fiscalización a la seguridad privada, en eventos masivos y todos los espacios que generen demanda de policías. “Un mal trabajo en seguridad privada saca recursos públicos valiosos que deben estar en los barrios”, aseguró
El Subsecretario Vergara destacó que “nuestra responsabilidad como autoridad civil de la seguridad preventiva es otorgar a las policías directrices de acción preventiva que permitan establecer los parámetros para las estrategias territoriales, las que deben estar sustentadas en el reforzamiento de la co-producción de seguridad con municipios, la apertura de las comisarías para el trabajo conjunto, la focalización sobre los delitos de mayor impacto, redoblar los esfuerzos sobre narcotráfico y crimen organizado y fiscalizar actividades que demandan recursos policiales de manera eficiente para que las policías puedan estar donde más se les necesita”.
“Como responsables de la política preventiva nacional es nuestro deber trabajar en conjunto con las Comisarías, para otorgar claridad en nuestro mandato de prevenir y proteger a quienes habitan en este espacio nacional compartido”, sentenció.
